Finalmente llegamos a su casa, una de esas ni muy grandes ni muy pequeñas, perfectas para una o dos personas. Tenía un bonito jardín, aunque estaba cubierto de pequeñas piedras, y no césped. Él sacó las llaves de uno de los bolsillos de su chaqueta y abrió la puerta, entró y dejó donde pudo
las cosas que llevaba en la otra mano. Me dijo que dejara las que llevaba yo al lado también, así que eso hice. Estuve un rato observando su casa, era bastante acogedora, era un poco como la mía y eso es algo que me gustaba ya que así me sentía como en casa aunque por la otra parte me daba algo de
vergüenza estar ahí. Recorrí un poco los pasillos, habitaciónes y algun que otro rincón más para conocermela. Corey me indicó la habitación en la que podía dormir, estaba al lado de la suya y eran más o menos iguales. En la mía solo había un colchón sin nada más, una mesilla con una televisión, un
pequeño armario y algunas estanterías con cosas como fotos y libros que seguramente cotillearía en algún momento. Corey vino detrás de mi y entró en la habitación.
-¿Qué te parece?
-Es perfecto -sonreí- Tendremos que preparar la habitación ya ¿No?
-Claro, como quieras. Mm.. Ven, cogeremos sabanas, mantas y todas esas cosas.
Le seguí hasta su habitación donde seguramente guardaría todo eso. Abrió su armario y sacó algunas mantas, una almohada y otras cosas para preparar la habitación. Mientras él iba a la otra habitación me quedé mirando algunas fotos que estaban colocadas en algunas estanterías. Había algunas que estaba con Joey, era gracioso porque en la mayoría de ellas salia con caras graciosas; al lado de éstas habia una en la que salía con una chica, una chica bastante guapa seguramente de mi edad, 24 o 25 años, algo así. Qué suerte esa chica, pensé, parecían muy felices en ese momento. Dejé de mirar esa foto y bajé la mirada, salí de aquella habitación y fui a ayudar a Corey.
-Bueno Patry, ven, ayudame con ese extremo de la cama que no llego -me dijo algo apurado-
-¡Voy, voy!
Fui hacia él y cogí una punta de la sabana para poder colocarla bien, después pusimos una de las mantas y encima un edredón que parecia ser bastante calentito. Finalmente coloqué la almohada y Corey se estiró, cansado, como si no hubiese dormido en días.
-Qué, ¿cómodo?
-Ogh.. Bastante. Qué ganas tenía de estirarme de nuevo.. -rió-
-¿No has dormido? -pregunté-
-No mucho, con todo esto de Joey tuve que despertarme mucho antes para llevarle y después para volver a por sus cosas, así que no.
-Entiendo.. Entonces podrías descansar un poco, ¿no crees?
-Supongo -me sonrió y cerró los ojos-
-Por cierto, ¿de quien es esta habitación? -insistí otra vez indirectamente para saber si vivia con alguien más-
-Oh de nadie en especial, simplemente cogí una casa con otro dormitorio más, invitados y eso.. ¿No?
-Claro -asentí-
-Oye, creo que me voy a quedar en tu cama a dormir un rato -rió mientras volvia a cerrar los ojos nuevamente- Estoy que no me puedo ni levantar...
-Por supuesto, mejor que descanses.
-Perfecto. Ah, si tienes hambre en la cocina puedes hacerte lo que quieras, en el salón habrá algo con lo que puedas entretenerte y esas cosas ¿vale?
-No hay problema -respondí-
Salí de la habitación y fui hacia el salón. Sabía que acabaría por cotillearle toda la casa, soy de lo peor. Espera.. Un momento, no tengo ropa, ¿se puede saber qué me pondré? Bueno, ahora es igual, ya lo pensaré más tarde. Cogí mi movil para ver si tenía alguna novedad pero estaba igual que antes, pensé que después podría avisar a Aíra y así no se liaría para cuando viniese.
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